"Los caracteres que especifican claramente al mito gnóstico y que mutuamente se complementan entre sí, son los siguientes:
La Gnosis es eminentemente científica porque sus prácticas son demostrables. El campo de estudio de la Gnosis es el hombre mismo. Por ello, podemos colegir que se trata de un estudio antropocéntrico, pues todo está dirigido a transformar el hombre común y corriente en un hombre superior. La Gnosis no es una religión, pero sus estudios permiten la total comprensión de cualquier doctrina religiosa.
Ciertamente, los problemas de la humanidad existen porque el ser humano está desprovisto de la facultad de la Conciencia. Ya en renglones anteriores hemos definido a la Conciencia científicamente y hemos dicho que es la capacidad psicológica de aprehender o capturar todos los fenómenos externos e internos inherentes a nosotros mismos. Pues bien, está demostrado científicamente que el hombre de nuestros días tan solo posee un tres por ciento de Conciencia despierta frente a un noventa y siete por ciento de Conciencia adormecida dentro de sí mismo. Esto produce, obviamente, que muchos de nuestros actos sean inconscientes y muchas veces incoherentes. Incuestionablemente, esto trae confusión, choques sociales, traumas de todo tipo, angustias, ansiedades, estrés, etc., etc., etc. Lo peor de todo esto es que el resto de Conciencia que está adormecida está prisionera de fuerzas energéticas que la esclavizan y que la someten a sus caprichos.
"Hablando francamente y sin ambages diremos: la Gnosis es un funcionamiento muy natural de la Conciencia; una filosofía perennis et universalis".
Incuestionablemente, GNOSIS es el conocimiento iluminado de los misterios divinos reservados a una élite (gentes ansiosas de conocer los misterios de la vida y de la muerte). La palabra gnosticismo encierra dentro de su estructura gramatical, la idea de sistemas o corrientes dedicadas al estudio de la Gnosis.
"Este gnosticismo implica una serie coherente, clara, precisa, de elementos fundamentales verificables mediante la experiencia mística directa, por ejemplo:
Por otra parte existe una Gnosis precristiana implícita en el saber filosófico y místico de los pueblos del pasado. De esta manera tenemos, por lo tanto, que: "Los códices mexicanos, papiros egipcios, ladrillos asirios, rollos del Mar Muerto, extraños pergaminos, así como templos antiquísimos, sagrados monolitos, viejos jeroglíficos, pirámides, sepulcros milenarios, etc., ofrecen, en su profundidad simbólica, un sentido gnóstico que definitivamente escapa a la interpretación literal y que nunca ha tenido un valor explicativo de índole exclusivamente intelectual".
"El racionalismo especulativo de los antropólogos e historiadores modernos, en vez de enriquecer el lenguaje lo empobrece lamentablemente, ya que los relatos gnósticos, escritos o alegorizados en cualquier forma artística, se orientan siempre hacia el SER interno de la persona humana. Y es en ese interesantísimo lenguaje de la Gnosis, semifilosófico y semimitológico, donde se presentan una serie de invariantes extraordinarias, símbolos con un fondo esotérico que en silencio le hablan a la Conciencia".
"Hemos investigado en las fuentes de la China, en las obras sánscritas de la India, en los viejos manuscritos tibetanos. Nos hemos preocupado por el estudio de las piezas arqueológicas, hemos investigado profundamente muchos códices, analizado la sabiduría de las antiguas civilizaciones, realizado estudios comparativos entre México, Egipto, la India, el Tíbet, Grecia, etc., etc., etc.; y hemos llegado a la conclusión de que la sabiduría universal es siempre la misma, sólo cambian sus aspectos, de acuerdo con los pueblos, naciones y lenguas".
"Si bien es cierto que debemos tener en cuenta en cualquier sistema gnóstico sus elementos helenísticos orientales, incluyendo Persia, Mesopotamia, Siria, India, Palestina, Egipto, etc., nunca deberíamos ignorar los principios gnósticos perceptibles en los sublimes cultos religiosos de los Nahuas, Toltecas, Aztecas, Zapotecas, Mayas, Chibchas, Incas, Quechuas, etc., etc., etc., de Indo América".
"Es bueno saber que etimológicamente, el vocablo Gnosis deviene del griego y significa conocimiento; sin embargo, es evidente que no se trata de un conocimiento ordinario. Gnosis se refiere a una Sabiduría superior, trascendental para el ser humano. Ese saber universal y atemporal, del que ha emanado la enorme similitud teológica, filosófica, artística y simbólica de las grandes civilizaciones del pasado, testimonio de haber bebido todas en la misma fuente original".
"La JANA, YANA, GHANA o GNOSIS es la ciencia de JANO, o sea, la ciencia de ENOICHON o del vidente. La palabra JINA, de la cual deviene el término GNOSIS, no es sino la castellanización de dicha palabra; su verdadera escritura deriva del parsi y del árabe, y no es JINA, sino DJIN o DJINN, y así la vemos empleada por muchos autores".
Pero, yo he oído que la Gnosis es algo así como una doctrina herética surgida de entre el seno del cristianismo primitivo. ¿Es esto cierto?
Usted puede haber leído afirmaciones como esa porque existen algunas obras publicadas intencionalmente por instituciones religiosas que pretenden desprestigiar la Gnosis y los gnósticos. Empero, tales afirmaciones carecen de fundamento dialéctico. La Gnosis ya existía antes del advenimiento del cristianismo y de Jesús de Nazareth. Sin embargo, bueno es que usted sepa, por ejemplo, que:
Orígenes (uno de los Padres de la iglesia cristiana), en su Vol. II, página 150, observa que:
Existen algunos que dicen de Juan que él era el ungido (el Christus).
Cuando las concepciones metafísicas de los gnósticos, que veían en Jesús al Logos y al ungido, empezaron a ganar terreno, los primitivos cristianos se separaron de los nazarenos; los cuales acusaban a Jesús de pervertir las doctrinas de Juan y de cambiar por otro el bautismo en el Jordán
(Esto es textual del Codex Nazarenus, II, página 109)
Que las gentes aunque viven, no saben vivir porque son víctimas de las circunstancias. Todo les sucede, como cuando llueve, como cuando truena. No son capaces de generar nuevas circunstancias. No saben por qué sufren, por qué se enferman, por qué nacen, por qué mueren, etc., etc.
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